Llamamiento

Aquí: versión galega

¡Somos el riesgo de las inversiones!

STOP CARBÓN – PROTEJAMOS EL CLIMA

Ende Gelände (Hasta aquí y no más allá) para el carbón lignito en Lusacia: ¡acción de justicia climática!

En 2016, la despedida al carbón continúa: Vattenfall, propietaria del yacimiento de carbón en Lusacia está tratando de vender su rama alemana del carbón lignito. Esta es una oportunidad única para cerrar finalmente minas a cielo abierto y centrales eléctricas de carbón, y así mostrar que es posible la eliminación del carbón de una manera social y ecológicamente responsable.

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A pesar de todo, Vattenfall solo busca vender: supuestamente, un nuevo inversor continuará con el sistema de energía centralista y destructivo durante las próximas décadas. Este acuerdo sería la mayor inversión en el carbón en la totalidad de Europa – provocando más reasentamientos, nuevas centrales, contaminación del agua potable y desastres climáticos.

Lusacia es un ejemplo acerca de cómo son ejecutadas las políticas climáticas en este momento: todos/as pretenden querer la eliminación de los combustibles fósiles, a pesar de que realmente nadie intenta mantenerlos en el suelo. Las cumbres climáticas declaran la transición a energías renovables y los mismos gobiernos siguen donando eficazmente cientos de billones de subvenciones a la industria de combustibles fósiles. El gobierno alemán habla de protección climática – y derrama oro sobre las viejas centrales de RWE y Vattenfall. Gran Bretaña elabora una gran declaración acerca del adiós al carbón – solo para invertir luego en el fracking y la energía nuclear. El “crecimiento ecológico” debe, de algún modo, marcar la diferencia.

DECIMOS: BASTA! No vender, sino más bien poner fin al carbón – “Ende Gelände“! Si Vattenfall quiere cerrar su negocio en Lusacia, solo para dejarle el trabajo sucio a alguien más, vamos a poner el pie en la puerta. Y pisaremos los dedos de los líderes actuales en políticas climáticas. Ya que no podemos esperar ni confiar en la política.

ESTAREMOS EN PIE DONDE TIENEN QUE PARAR LAS EXCAVADORAS. Demandamos: ¡fin del carbón ahora! Y sabemos: que se trata de trabajo físico. Cientos de nosotros/as cerraremos la mina de carbón en Lusacia en una acción masiva de desobediencia civil. Cualquiera puede participar en la acción (bien sea un/a activista experimentado/a o no) – juntos/as pararemos las excavadoras.

blauVINIMOS PARA QUEDARNOS. El pasado año 1.550 personas entraron en el foso de una mina de carbón lignito en Renania. Este año llegaremos a Lusacia, donde la gente ha luchado contra la minería y sus reasentamientos durante años. ¡Y lanzaremos otra señal contra la locura del carbón lignito! Incluso aunque nuestras acciones no sean legales – en cualquier caso serán legítimas. Como el tiempo se acaba: si los combustibles fósiles no se mantienen en el suelo ahora, las consecuencias catastróficas para cuatro millones de personas difícilmente podrán ser evitadas.

ESTAMOS EN TODAS PARTES. La lucha contra la minería de carbón lignito en Lusacia alemana y polaca, es parte de una lucha global. La gente está en lucha alrededor del mundo contra el capitalismo de los combustibles fósiles. Están parando centrales eléctricas de carbón en la India, gasoductos en los EE.UU., puertos carboneros en Australia, fracking en Brasil y explotaciones petroleras en Nigeria. Mientras el Norte global calienta la crisis climática, sus países tienen, aún así, mejores posibilidades de adaptación. En el Sur global, en cambio, el cambio climático está destruyendo los medios de vida de millones de personas. Muchas de ellas mueren en las fronteras con Europa. Son víctimas de un régimen de fronteras racista, con vistas a mantener fuera las consecuencias del cambio climático. La lucha contra las causas fundamentales de la migración también comienza en Lusacia. Justicia climática ahora!

¡LO QUEREMOS TODO: EL FIN DEL CAPITALISMO DE COMBUSTIBLES FÓSILES! No estamos luchando solo contra el carbón, contra el fracking y el petróleo, sino que desafiamos fundamentalmente la lógica de los beneficios y la locura del crecimiento; por esto se promueven soluciones erróneas como mecanismos de mercado, proyectos a gran escala y la continua explotación del Sur global. Mientras que unas pocas empresas energéticas están prosperando y son mimadas con subvenciones, las mismas compañías desconectan de la red eléctrica, solo en Alemania, a 350.000 hogares cada año – haciendo creer a sus empleados/as que la minería del carbón continuará para siempre. Y, sin embargo, el personal es crucial para una transición justa. Necesitamos un plan, como sociedad, de cómo organizarnos y financiar una transformación ecológica y social – más allá de la lógica de beneficios capitalistas. Todos/ as acarreamos las consecuencias de las políticas energéticas y en consecuencia todos/as queremos formar parte de la toma de decisiones: pedimos un suministro energético democráticamente organizado!

¡SOMOS EL RIESGO DE LAS INVERSIONES! Quien compre el lignito en Lusacia obtendrá nuestra resistencia como parte del paquete. Cuantos/as más seamos y mayor sea la protesta, menos atractivo será el lignito, más barato será el precio y menos probable será el acuerdo. Nada ha sido decidido todavía. Juntos/as podemos parar el acuerdo y hacer que Vattenfall clausure la mina: el tiempo del carbón se ha acabado. Así que entremos en la mina y aumentemos el riesgo.

EN MAYO DE 2016 DECIMOS: ¡PONGÁMONOS EN MARCHA! ¡“ENDE GELÄNDE” EN LUSACIA!

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